A pesar de que los cambios introducidos por la oposición generaron malestar en la Casa Rosada, el oficialismo libertario intentará avanzar hoy con el tratamiento del Presupuesto 2026 en el Senado con la mira puesta en su sanción definitiva en una sesión que sería convocada para el próximo 26 de diciembre.
La iniciativa, que aprobó Diputados en la Cámara baja en la madrugada del jueves, es discutida desde las 10 en la Comisión de Presupuesto y Hacienda, que preside el oficialista Ezequiel Atauche (Jujuy).
También hoy, el Gobierno pretende avanzar en la Comisión de Justicia y Asuntos Penales para constituirse y tratar el proyecto conocido como Inocencia Fiscal. Se trata del intento del Gobierno de introducir cambios en el régimen penal tributario con el fin de permitir el blanqueo de dólares sin que las oficinas fiscales gubernamentales o entidades financieras estén obligados a indagar o reportar su origen, también conocido como Inocencia Fiscal.
Se espera que ambas reuniones sean impugnadas por el kirchnerismo, como lo anticipó el rionegrino Martín Soria al volver a la carga sobre la ilegalidad de la resolución adoptada por la presidenta de la Cámara alta, la vicepresidenta Victoria Villarruel, que decidió la integración de las comisiones de trabajo parlamentario.
La eliminación del capítulo que contenía la derogación de las leyes de financiamiento universitario y de declaración de emergencia en atención a la discapacidad provocó hondo malestar en la Casa Rosada, que comenzó a buscar culpables en la oposición dialoguista por el supuesto fracaso.
De hecho, por la mañana se dejó correr desde la sede del Poder Ejecutivo la versión de que la norma no le servía al Gobierno y que hasta podían llegar a vetarla si salía tal cual la aprobó Diputados.
Sin embargo, con el transcurso del día y con el Senado en estado de rebelión y amenazando con hundir la reforma laboral, el oficialismo decidió dar marcha atrás.
Fue así como Atauche recibió la instrucción de avanzar con la firma del dictamen al proyecto tal como fue aprobado por la Cámara baja para dejarlo, así, listo para su tratamiento en el recinto la semana próxima.
La amenaza de veto no fue el único inconveniente. También generó malestar, en este caso en todos los bloques, el hecho de que el texto no contempla actualización para el presupuesto del Congreso.
Las negociaciones por este tema estuvieron a cargo del senador oficialista Agustín Monteverde (Capital) quien, como no logró modificar el texto durante su debate en la Cámara baja, terminó acordando con el ministro de Economía, Luis Caputo, la ampliación del presupuesto mediante una resolución administrativa.


