Los hijos de famosos muchas veces imitan los gustos ‘extravagantes’ de tus papás, y North West, hija de Kanye West y Kim Kardashian, es un claro ejemplo, pues recientemente presumió unos grillz que se puso en los dientes.
También conocidos como parrillas dentales, los grillz de North West causaron polémica no solo por su edad (12 años), también por ser un accesorio sumamente costoso al estar incrustados con diamantes y tener forma de picos de tiburón.
El uso de grillz se asocia principalmente con adultos, además de que llevarlos con frecuencia puede causar daños en los dientes, de acuerdo con expertos en el tema.
A través de su cuenta de Instagram con solo unos días de creación, North West compartió algunas fotos en lo que parece ser un avión privado, así como la sala de su casa.
En el carrete, se aprecian algunas fotos en las que sale la adolescente e hija de Kim Kardashian con unos grillz dentales en forma de pico, que asemejan la dentadura de un tiburón, e incrustados totalmente de diamantes.
El accesorio viene en una pieza que cubre tanto dientes superiores como inferiores, y está hecha de un material metálico en donde se le incrustaron los diamantes.
Para este trabajo, North y su mamá, la empresaria Kim Kardashian, acudieron con el joyero de las estrellas Johnny Dang, experto en la elaboración de grillz para celebridades de la talla de Travis Scott, El Alfa y Drake, por mencionar algunos.
“Mi niña North West me contactó para conseguir ‘hielo’ en Navidad y fui directo a trabajar”, dijo Gang en un video donde muestra la pieza de grillz que elaboró para la adolescente de 12 años.
El joyero explicó que la misma North buscaba una pieza afilada, con forma de dientes de tiburón, por lo que utilizó diamantes de distintas medidas para crear ese efecto puntiagudo.
Se desconoce el costo oficial de esta pieza, totalmente personalizada para la hija de Kanye West, aunque en redes sociales estiman que tendría un costo aproximado de 170 mil dólares, aunque otros aseguran que su precio es de hasta 2 millones de dólares.
Los grillz dentales son cubiertas decorativas que se ajustan sobre los dientes y pueden colocarse de forma temporal o permanente.
Están diseñados con fines estéticos, y su uso se popularizó gracias a celebridades y movimientos culturales desde los años 80, aunque en la actualidad es más común verlos en personas que les gusta la cultura del rap y hip hop.
De acuerdo con el sitio especializado Mouth Healthy, existen dos tipos básicos de grillz:
Su principal atractivo radica en el diseño personalizable con metales y gemas. Sin embargo, la presencia de un objeto metálico en contacto permanente o prolongado con los tejidos orales cambia la dinámica de higiene bucal y biomecánica de la boca, según Dental Health.
Aunque no hay estudios que determinen efectos a largo plazo de los grillz, la literatura profesional y consejos de asociaciones dentales señalan varios riesgos potenciales asociados con su uso prolongado o inadecuado.
Los grillz pueden crear espacios donde quedan atrapados restos de comida y placa bacteriana entre la superficie dental y la pieza metálica. Este ambiente favorece el desarrollo de ácidos que desmineralizan el esmalte, lo que incrementa el riesgo de caries.
La presencia de los grillz dificulta el cepillado y el uso de hilo dental de manera eficaz. La placa no eliminada se endurece en sarro, lo que agrava la posibilidad de caries y enfermedades periodontales.
Los bordes de los grillz que no están perfectamente adaptados pueden rozar o presionar las encías y provocar irritación, sangrado o inflamación. Con el tiempo, puede favorecer la aparición de gingivitis y, si continúa, de periodontitis.
El contacto constante entre grillz y esmalte, especialmente si la pieza no está bien ajustada, puede causar desgaste del esmalte dental, capa protectora de los dientes que no se regenera una vez perdido, lo que deja los dientes más vulnerables, según explica Science Insights.
Emergency Dental of Detroit explica que un grill que no encaja correctamente puede desplazarse o ejercer presión desigual sobre los dientes. Esto incrementa la probabilidad de que se astillen o fracturen, lo que podría requerir tratamientos restaurativos complejos.
Algunos materiales metálicos, sobre todo aquellos que no son de alta calidad o contienen níquel, pueden provocar reacciones alérgicas o sensibilidad en personas susceptibles.
El uso prolongado de grillz mal ajustados puede interferir con la mordida normal y, con el tiempo, causar alteraciones en la posición de los dientes.
La acumulación de bacterias y restos de comida en las áreas difíciles de limpiar alrededor de los grillz puede contribuir a la halitosis, es decir, mal aliento.
Dado el potencial de efectos adversos, asociaciones dentales como la American Dental Association recomiendan que cualquier decisión sobre el uso de grillz se tome con la orientación de un profesional dental.


