El mercado cripto ha entrado en una fase de consolidación cautelosa justo cuando la Reserva Federal se prepara para una de sus transiciones políticamente más cargadas en décadas. El mandato de Jerome Powell como presidente de la Fed termina en mayo de 2026, y el presidente Donald Trump ya está posicionando aliados para puestos clave en la junta. Este cambio podría redefinir el tono monetario del próximo ciclo — y con él, la trayectoria de activos de riesgo como las criptomonedas.
Total Mercado Cripto: TradingView
Históricamente, el mercado cripto prospera en entornos ricos en liquidez. Las corridas alcistas de Bitcoin en 2017, 2021 y mediados de 2024 estuvieron respaldadas por condiciones acomodaticias de la Fed o expansión del balance. Como muestra el gráfico, la capitalización total del mercado cripto ahora ronda los 2,94 billones de dólares, con volatilidad comprimida dentro de las Bandas de Bollinger y la acción del precio deslizándose justo por debajo de la media móvil de 20 días (línea azul). Los traders parecen estar en modo de espera, reflejando incertidumbre macroeconómica más que debilidad específica del sector.
Las Bandas de Bollinger se han estrechado considerablemente — una señal clásica de volatilidad inminente. La banda superior se sitúa alrededor de $3,12B, mientras que el soporte inferior ronda cerca de $2,84B, creando un corredor de trading estrecho. Esta compresión sugiere que los mercados anticipan una ruptura pero carecen de un catalizador claro en el corto plazo.
Los indicadores de impulso apuntan a una presión de venta decreciente pero aún sin reversión confirmada. Los intentos fallidos del mercado de recuperar la resistencia de la banda media desde principios de diciembre indican confianza menguante. Si la Fed señala recortes de tasas tempranos o un tono más acomodaticio, un movimiento por encima de $3,0B–$3,1B podría desencadenar una renovada etapa alcista apuntando a $3,25B–$3,5B. Por el contrario, si resurge la retórica restrictiva, podríamos ver una nueva prueba de $2,8B, seguida de barridos de liquidez más profundos hacia $2,5B (la zona de Fibonacci 0,618).
Aunque los nuevos nombramientos de Trump para la Fed podrían inclinarse hacia recortes de tasas, la inercia institucional del banco central sigue siendo fuerte. Economistas de Morgan Stanley y Wells Fargo esperan que el marco de política de la Fed permanezca en gran medida intacto hasta 2026–2027, incluso con cambio de liderazgo. Eso significa ningún giro brusco en la política de tasas — solo una flexibilización gradual, probablemente vinculada al enfriamiento de la inflación y la estabilidad del empleo.
Aún así, los mercados operan sobre expectativas, no realidades. Si los inversores creen que los nuevos nombrados de Trump priorizarán el crecimiento sobre el control de la inflación, el apetito por el riesgo podría aumentar prematuramente — encendiendo una ola especulativa en activos cripto, especialmente Bitcoin y Ethereum, mientras los traders anticipan capital más barato y perspectivas de USD más débiles.
La correlación de las criptomonedas con la política monetaria de EE.UU. se ha estrechado desde 2022. La acción del precio moderada del gráfico desde noviembre se alinea con una mayor resiliencia del dólar y rendimientos reales manteniéndose positivos. A medida que los rendimientos comiencen a comprimirse a mediados de 2026 — un resultado probable bajo una Fed más acomodaticia — el capital podría rotar de vuelta a activos de riesgo. En tal caso, las stablecoins, tokens DeFi y altcoins de gran capitalización podrían ver entradas similares al ciclo de liquidez 2020–2021.
Mientras tanto, la barrera psicológica en los 3 billones de dólares sigue siendo crucial. Un cierre confirmado por encima de esa marca, con volumen en expansión, señalaría la preparación del mercado para otra etapa al alza. Por debajo de $2,8B, sin embargo, el sentimiento podría cambiar, empujando la capitalización total del mercado hacia el clúster de soporte de $2,5B–$2,6B, donde los compradores a largo plazo podrían reingresar.
La transición de la Fed en 2026 introduce tanto riesgo político como oportunidad. Si el sucesor de Jerome Powell prioriza el crecimiento y reduce las tasas más rápido de lo esperado, las criptomonedas podrían adelantarse a los mercados tradicionales, desencadenando un rally temprano. Pero si la narrativa de continuidad de la Fed se mantiene, espere acumulación lateral hasta bien entrado el segundo trimestre de 2026.
Por ahora, los traders deben estar atentos a una ruptura de volatilidad de la actual compresión de Bollinger. Posicionarse antes de la ventana política de febrero–mayo podría ser clave. ¿La conclusión más amplia? El mercado cripto se está enrollando para un movimiento impulsado por factores macroeconómicos, y el próximo presidente de la Fed puede decidir su dirección más que cualquier halving o aprobación de ETF.
La compresión del gráfico y la volatilidad moderada reflejan la vacilación de los inversores ante un cambio potencialmente sísmico en el liderazgo de la Fed. Ya sea que la influencia de Trump acelere los recortes de tasas o no, los próximos doce meses determinarán si la consolidación de las criptomonedas se transforma en expansión — o en una corrección más profunda. La próxima ruptura del mercado no será solo técnica; será política.

