California retiró una demanda contra la administración Trump por suspender la inversión de US$4 mil millones en subvenciones federales para el diseño ferroviario de alta velocidad que trasladaba pasajeros entre San Francisco y Los Ángeles. Las autoridades confirmaron que se centrarían en otras fuentes de financiación para completar el proyecto.
De acuerdo con AP, las autoridades de California planean seguir con el proyecto sin financiación federal, y agregaron que solo el 18% de los gastos del programa proviene de fondos federales.
“Esta acción refleja la evaluación del Estado de que el gobierno federal no es un socio confiable, constructivo ni digno de confianza en el avance del ferrocarril de alta velocidad en California”, dijo un portavoz estatal.
Asimismo, la autoridad ferroviaria dijo que este cambio de enfoque en el financiamiento ofrece “una nueva oportunidad” para el proyecto.
“Avanzar sin la participación de la administración Trump le permite a la autoridad aplicar las mejores prácticas globales probadas y utilizadas con éxito por los sistemas ferroviarios de alta velocidad modernos en todo el mundo”, afirmaron.
La agencia de California destacó que estaban por iniciar un proceso para atraer inversionistas y desarrolladores privados para el verano boreal de 2026.
El proyecto estaba previsto para finalizar en 2020 con un costo de US$33 mil millones. Ahora, se estima que costará entre US$89 mil millones y US$128 mil millones y que comenzaría a prestar servicio en 2033.
La disputa inició en julio de este año, cuando el Departamento de Transporte (DOT, por sus siglas en inglés) decidió retirar US$4 mil millones de financiación para la construcción del tren bala para transportar pasajeros entre San Francisco y Los Ángeles.
Para el presidente Donald Trump y el secretario de Transporte, Sean Duffy, el proyecto del tren “nunca iba a existir” pese a las promesas establecidas por el gobierno de California.
“El ferrocarril que nos prometieron aún no existe, y nunca existirá”, escribió Trump en su cuenta de Truth Social. “Este proyecto fue extremadamente caro, sobrerregulado y nunca se entregó”.
Tras esta medida, el gobernador Gavin Newsom anunció que la Autoridad de Ferrocarriles de Alta Velocidad demandaría a la administración Trump por considerar la normativa como una “represalia política mezquina” contra el gobierno de California.
“La cancelación por parte de Trump de las subvenciones federales para el tren de alta velocidad de California huele a política. Es otra maniobra política para castigar a California”, señaló el gobernador en un comunicado del estado.
“En realidad, esto es solo un ataque despiadado contra el Valle Central que pondrá en peligro empleos y medios de vida reales. Estamos demandando para impedir que Trump descarrile el único tren de alta velocidad de Estados Unidos en construcción”, cerró en aquel momento.


