Essity y UNICEF México mejoran higiene y educación infantil

Essity y UNICEF México unieron esfuerzos para que niñas, niños y adolescentes tengan acceso a agua limpia, servicios sanitarios adecuados y educación sobre el ciclo menstrual. La vocera de Essity, Alejandra Pulido, asegura que estos elementos fortalecen la autoestima y ayudan a que los estudiantes permanezcan en la escuela.

Desde 2019, la alianza “La Higiene es Nuestro Derecho” trabaja sobre tres frentes: infraestructura escolar WASH (agua, saneamiento e higiene), educación en salud y ciclo menstrual, y acciones de incidencia para que los avances sean sostenibles. En seis años, miles de estudiantes en zonas con mayores rezagos estudian en entornos más seguros y dignos.

Los programas concretos incluyen la mejora de instalaciones escolares con agua potable, baños funcionales y espacios para lavado de manos. Además, se capacita a docentes para asegurar el uso y mantenimiento continuo de estas instalaciones. En educación, destacan la serie radiofónica “Mis Días de Luna”, que lleva información sobre el ciclo menstrual a comunidades con conectividad limitada, y la donación de productos de higiene a niñas, mujeres y familias en movilidad. También generan evidencia para fortalecer políticas públicas, como la Encuesta Nacional de Gestión Menstrual.

El impacto se mide con indicadores claros. Más de 15,900 estudiantes y 350 docentes se han beneficiado directamente. Se implementaron 10 modelos de infraestructura adaptados a distintos contextos, y 430 docentes y 305 jóvenes fueron capacitados como replicadores. Además, 22 entidades federativas avanzan en marcos normativos de salud menstrual e higiene escolar.

Pulido destaca que el mayor reto para las empresas es integrar la sostenibilidad como eje estratégico, con objetivos claros, transparencia y resultados medibles. Essity también trabaja para reducir su huella hídrica, fomentar el uso responsable del agua y avanzar hacia operaciones net zero en 2050. Estas acciones se alinean con los ODS de la ONU: salud y bienestar, educación de calidad, igualdad de género, agua limpia y saneamiento, producción responsable y acción climática.

La alianza impulsa cambios de comportamiento y políticas públicas. El objetivo final: garantizar que la educación, la higiene y el acceso al agua sean derechos reales para todas y todos, fortaleciendo comunidades resilientes y fomentando un desarrollo más justo y sostenible.